noviembre 07, 2023
A las escuelas, colegios y universidades se les exige cada vez más la implementación de prácticas sostenibles visibles; de hecho, el 87 % de los alumnos universitarios otorga a ello una gran importancia en su centro (1).
Los estudiantes no se limitan a decir que sus universidades deberían hacer más. A la hora de elegir el centro o la universidad en la que estudiar, más de tres cuartos de los futuros alumnos tienen en cuenta la «voluntad clara de estos centros por reducir el impacto medioambiental, promover el desarrollo sostenible y disminuir los residuos».2
Con toda esa cantidad de residuos por manejar y transportar, tantos tipos diferentes de residuos reciclables por recoger y tantos presupuestos que controlar para los responsables de los centros educativos de hoy, ¿cómo saber cuál es el mejor sistema de reciclaje?
Facilitar el reciclaje
Muchos centros educativos actúan ya como auténticos pioneros del reciclaje comercial y separan los residuos en su origen, gracias a un programa de clasificación, cosa que les ayuda enormemente a alcanzar sus objetivos de reciclaje y a reducir los costes derivados de la gestión de residuos. Pero, ¿en qué debemos fijarnos a la hora de elegir los contenedores?
La elección de sistemas modulares, fáciles de instalar, le ofrece la flexibilidad necesaria para colocar los contenedores adecuados en los lugares apropiados: contenedores de reciclaje de papel en las oficinas, latas, botellas y desechos orgánicos en los comedores, etc.
Una vez distribuidos los contenedores, el siguiente paso es asegurarnos de su facilidad de uso para las personas, por ejemplo, escogiendo contenedores distinguidos por colores y símbolos claros, para evitar al máximo el riesgo de algo tan costoso como la contaminación cruzada. Eche un vistazo a nuestros contenedores de reciclaje Slim Jim ®.
Asimismo, es importante implicar al personal y a los alumnos en buenas prácticas de reciclaje, para que sepan qué debe reciclarse y dónde, y, en definitiva, cómo aportar su granito de arena para hacer de su centro educativo un lugar más ecológico. Organizar sesiones informativas en equipo y distribuir carteles recordatorios puede ser una buena idea.
Trabajar con grandes volúmenes
Los grandes centros educativos de varios edificios manejan grandes volúmenes de residuos en entornos no siempre fáciles. Para estos casos, necesitamos contenedores de residuos que estén a la altura. Piense por ejemplo en los contenedores de la gama BRUTE®, de larga durabilidad y garantías.
Transportar grandes cantidades de residuos entre edificios y llevarlos a los puntos de recogida centrales tampoco es tarea fácil. Nuestra gama BRUTE® con ruedas le ofrece la durabilidad propia del contenedor BRUTE®, pero está pensada para moverse. Su diseño ergonómico hace el transporte de residuos cinco veces más fácil, al tiempo que protege la integridad física del personal de mantenimiento, ya que les permite adoptar mejores posturas y trabajar con menos tensión.
Una lección de residuos alimentarios
Un flujo de residuos importante, que no suele tenerse mucho en cuenta, a pesar de que se estima que contribuye entre el 8 y el 10 % a las emisiones globales de gases de efecto invernadero, es el desperdicio alimentario3. En 2021/22, la Universidad de Mánchester recogió 35 toneladas de residuos alimentarios en todo su campus (incluidas las residencias)4, mientras que, según cifras del Programa de Acción de Residuos y Recursos (WRAP), cada año se desperdician 55,4 toneladas de comida en las escuelas de educación primaria y 24,9 toneladas en las de secundaria5. Vemos, pues, la diferencia clara que puede suponer introducir un proceso de reciclaje de residuos alimentarios a la hora de alcanzar los objetivos de sostenibilidad.
En los comedores y las cocinas, en los que hay mucho desperdicio de comida y poco espacio, los contenedores de reciclaje compactos son la opción ideal. Eche un vistazo a nuestros contenedores Slim Jim ® de pedal frontal y a su diseño estilizado, en el que se ha aumentado el espacio para facilitar el acceso al pedal con el pie y dejar las manos libres para tirar los desechos, y que además cuentan con una tapa hermética para evitar los olores. Se trata de contenedores fabricados con material de primera calidad, lo que les confiere una gran durabilidad, y vienen con una garantía de cinco años.
Por su parte, para las áreas del alumnado y del personal, es fácil incorporar un sistema de reciclaje de residuos alimentarios a los sistemas existentes. .En cualquiera de los casos, tanto con los contenedores de reciclaje de diseño modular Slim Jim ®, que permiten añadir fácilmente un proceso o sistema adicional, como con los contenedores individuales Slim Jim con ventilación o de pedal frontal, no le resultará nada difícil incorporar el reciclaje de residuos alimentarios sin afectar a la uniformidad de sus sistemas existentes.
Buscando la excelencia con la Universidad de Keele
Para ayudarles en sus objetivos de «cero emisiones netas de carbono» para 2030, hemos trabajado con la Universidad de Keele, en Reino Unido, para implementar un sistema de reciclaje eficiente y rentable que lograra el delicado equilibrio entre funcionalidad y estética, con contenedores modulares que se adaptaran al sistema de clasificación de residuos del centro.
Encontrará todos los detalles de esta colaboración aquí.
Emprender el camino hacia un mejor reciclaje
Si desea una auditoría presencial gratuita sobre gestión de residuos y reciclaje con uno de nuestros expertos, póngase en contacto con nuestro equipo aquí.
O, si lo prefiere, nuestra herramienta online gratuita de auditorías en 90 segundos le hará una demostración indicativa de ahorro de costes y residuos aquí.
1 NUS research
2 Source: Shakespeare Martineau
3 United Nations Environment Programme (2021) Food Waste Index Report 2021 and FAO (2011) Global Food Losses and Food Waste. Extent, Causes and Prevention.
4 University of Manchester
5 WRAP